domingo, 19 de julio de 2009

El demonio y el ángel


Soy un demonio muy bien vestido, robo miradas, cautivo, encanto… nostálgico en las mañanas, “sonríe ha comenzado un nuevo día…” me repito en cada amanecer; es mi mirada que te embriaga pero no te entrego nada, es mi mirada que te arranca el alma.

¡Ho, demonio! coleccionista de almas, todos quieren tu amor pero no estas dispuesto a entregar tu propia esencia; me han susurrado cuando pensaba en esas grandes alas.

Soy un misterio, un enigma, lo soy todo, no soy nada… son mis palabras que te convencen que tu vida me pertenece, son mis palabras que te arrancan lagrimas…

¡Ho Demonio! Porque te ocultas detrás de esa triste mirada…

Eres un ángel, sencillamente un ángel, encantador, dulce, entregado… temeroso de su propio don, te niegas amar, pero vives de amor… con tus alas te cubres cuando pretenden tocarte…

¡Ho, dulce ángel!, te vengo a susurrar que tengo mucho amor por dar

¡Sonrió!
¡Callo!
¡Te miro..!

¡Me miras!... es mi mirar quien te deja sin palabras, podrías ser el bien que cure todo este mal que me embriaga, soy un demonio muy bien vestido, sostenido por un ángel, soy yo quien ha venido por ti, tan solo di que si, tengo tanto amor por dar, y tu tanto temor de amar…

1 comentario:

Pandora dijo...

puedes fingir que eres alguien que jamás serás
puedes hacer lo imposible por cumplir tus ideales de autoimagen, pero quien et ama siempre sabe bien quien eres, es como ¿un don? algo especial y muy dificil de expresar en palabras.